El objetivo de la campaña Lucha Por Los Niños es informar y educar a los padres, a los cuidadores de niños, y todos los interesados en el bienestar de los niños, sobre los riesgos documentados de las drogas psicotrópicas y los tratamientos nocivos para la salud mental que se administran para que puedan proteger a los niños del daño y ayudar a abogar por un cambio social.
Hoy en día en los Estados Unidos, a 6.7 millones de niños se les recetan potentes drogas psicotrópicas (que alteran la mente). De estos, la increíble cifra de 530,169 niños son de entre 0-5 años de edad, esto es más que toda la población de Sacramento, California.
Los fármacos psicotrópicos recetados a los niños contienen 409 advertencias de agencias internacionales reguladoras de drogas por causar efectos secundarios graves.
Los fármacos para el TDAH recetados a 3,396,066 niños y adolescentes están clasificados como altamente adictivos por la Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA, por sus por sus siglas en inglés) y en la misma categoría de drogas altamente adictivas que los opioides, la cocaína y la morfina.
Si la idea de dar electrochoque a los niños parece abuso infantil, es porque lo es.
Aunque la industria de la salud mental le haría creer que el tratamiento de electrochoque es "nuevo y mejorado", este sigue siendo el mismo tratamiento peligroso, inhumano y brutal que siempre ha sido. Y se está dando a los niños, lo que llevó a la Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color (NAACP, por sus siglas en inglés) y a otras organizaciones nacionales a pedir que se prohíba su uso en los niños.
Nadie argumentaría que los niños pueden experimentar problemas de conducta, emocionales o educativos, pero esto no significa que padezcan de una “enfermedad mental” y cualquier niño que esté siendo diagnosticado con un trastorno mental, no está siendo ayudado por la etiqueta sino estigmatizados por ella.
Como no se puede demostrar médicamente que exista un trastorno mental, los niños son etiquetados como enfermos mentales basándose únicamente en una lista de verificación de comportamientos.
Lamentablemente, los padres y cuidadores de niños no reciben la información más básica sobre cómo proteger a los niños de las prácticas abusivas en el campo de la salud mental.
La cuestión del consentimiento informado es prácticamente inexistente en la industria de la salud mental.
Es solo debido a la generosidad de los partidarios de Lucha Por Los Niños que esta campaña ha sido capaz de efectuar dichos cambios en nombre de los derechos de los niño.
Vea nuestro video a continuación para ver los testimonios de los padres sobre la ayuda que recibieron cuando más la necesitaban.